Somos Cobardes
Yo soy quien escribe este ensayo, que más que un un ensayo es una confesión.confesión a mí misma, un escape al miedo, las sociedades, las culturas, las religiones, las reglas, lo que debo ser y lo que soy. Y ser yo. Y por un momento poder jugar enredarme y correr con libertad en este laberinto de palabras y sentimientos en el cual no hay más miedos, sociedades, cultura, religiones y reglas. Sólo estoy yo y el resto del mundo.
Siempre ocurre que hay una pregunta la cual tiene muchas respuestas que divergen unas con otras y es el momento en que comienza la confusión, lo inexplicable, el tormento y el miedo a nosotros mismos. Y después de esa pregunta vienen más y más preguntas y más respuestas, y caemos en un laberinto de caos que hace lo que quiere con nosotros.
La vida es la lucha más grande que tenemos los seres humanos. Comenzamos desde que somos esperma, y luego al nacer lo primero que recibimos es un golpe y es cuando comenzamos la lucha, una lucha por vivir y existir. Así es como existimos, porque la gente nos hace existir, es así también como creamos un yo superficial, para la gente, y no para nosotros mismos, y cuando digo la gente me refiero a la sociedad, religión, cultura, familia, a las reglas, las leyes a las que estamos sometidos. Muchas veces, en más de alguna oportunidad, nos hemos dicho: ¡me gustaría hacer tal cosa, pero!...Es cuando empezamos a dar cuenta de que no somos personas libres, que hay muchas cosas que no podemos hacer por algún motivo u otro.
Cuando somos niños podemos hacer y decir un poco más, ya que recién se nos están enseñando a mentir, a engañarnos. Decimos que cuando somos niños somos crueles. Porque, ¿será que no sabíamos mentir? ¿Sera que la verdad es cruel? ¿que le tememos a la verdad, a las palabras? ¿Tememos a lo que somos? ¿Porque no aceptar, reconocer, mostrar, abrirnos y decir así somos? Y como dice Octavio Paz: “la mentira posee una importancia decisiva en nuestra vida cotidiana, en la política, el amor, la amistad. Con ella no pretendemos nada mas que engañar a los demás, sino a nosotros mismos...La mentira es un juego trágico, en el que arriesgamos parte de nuestro ser. Por eso es estéril su denuncia.″
Si nos preguntamos qué ha hecho la sociedad, la religión, la cultura, las reglas, las leyes, la civilización de nosotros como seres humanos, la respuesta sería polivalente. No podemos olvidar que así como somos juzgados, también somos parte de ella, de una sociedad cruel, racista, clasista, utilitarista, interesada. De alguna religión que nos quita la libertad, así como las reglas y las leyes, o de alguna cultura que llevamos en la sangre, y que nos encierra en un circulo sin darnos cuenta.
¿Qué pasa, cuando salimos de este círculo? ¿Cuando no aceptamos esta vida? ¿Cuando nos queremos revelar a lo que nos han impuesto? ¿Cuando queremos cambiar el mundo? ¿Cuando luchamos por nuestros propios ideales? ¿Cuando no creemos?. Las respuestas son muchas,…Hoy en día esto es algo que está presente, como un círculo sin comienzo ni fin. Donde buscamos vivir con lo que se nos ha dado y en momentos encontrar algύn escape y ser nosotros; ya sea, escribiendo , cantando, pintando, etc. Sin importar que nos digan locos. ¿Qué hacemos? ¿Luchamos por vivir? “hay que luchar por la vida la muerte siempre llega”.
Una de las cosas mas importante que buscamos los seres humanos es el amor, la entrega, abrirnos. ¿Por qué la necesidad de este amor? ¿ Será que necesitamos un alguien que no es la gente sino nosotros mismos, donde no le tememos a las palabras, a la verdad? Tenemos la necesidad de desnudarnos. Así como poco a poco nos vamos sacando los ropajes y tirándolos por ahí, es como poco a poco nos vamos sacando las mentiras y también las vamos tirando por ahí. ¿Y quienes somos? ¿qué hacemos? ¿cómo nos sentimos? Somos nosotros, que nos estamos abriendo y nos sentimos libres, donde no hay sociedad, religión, cultura, regla, ni ley que lo impida.
Indira Urrutia, 1994
Yo soy quien escribe este ensayo, que más que un un ensayo es una confesión.confesión a mí misma, un escape al miedo, las sociedades, las culturas, las religiones, las reglas, lo que debo ser y lo que soy. Y ser yo. Y por un momento poder jugar enredarme y correr con libertad en este laberinto de palabras y sentimientos en el cual no hay más miedos, sociedades, cultura, religiones y reglas. Sólo estoy yo y el resto del mundo.
Siempre ocurre que hay una pregunta la cual tiene muchas respuestas que divergen unas con otras y es el momento en que comienza la confusión, lo inexplicable, el tormento y el miedo a nosotros mismos. Y después de esa pregunta vienen más y más preguntas y más respuestas, y caemos en un laberinto de caos que hace lo que quiere con nosotros.
La vida es la lucha más grande que tenemos los seres humanos. Comenzamos desde que somos esperma, y luego al nacer lo primero que recibimos es un golpe y es cuando comenzamos la lucha, una lucha por vivir y existir. Así es como existimos, porque la gente nos hace existir, es así también como creamos un yo superficial, para la gente, y no para nosotros mismos, y cuando digo la gente me refiero a la sociedad, religión, cultura, familia, a las reglas, las leyes a las que estamos sometidos. Muchas veces, en más de alguna oportunidad, nos hemos dicho: ¡me gustaría hacer tal cosa, pero!...Es cuando empezamos a dar cuenta de que no somos personas libres, que hay muchas cosas que no podemos hacer por algún motivo u otro.
Cuando somos niños podemos hacer y decir un poco más, ya que recién se nos están enseñando a mentir, a engañarnos. Decimos que cuando somos niños somos crueles. Porque, ¿será que no sabíamos mentir? ¿Sera que la verdad es cruel? ¿que le tememos a la verdad, a las palabras? ¿Tememos a lo que somos? ¿Porque no aceptar, reconocer, mostrar, abrirnos y decir así somos? Y como dice Octavio Paz: “la mentira posee una importancia decisiva en nuestra vida cotidiana, en la política, el amor, la amistad. Con ella no pretendemos nada mas que engañar a los demás, sino a nosotros mismos...La mentira es un juego trágico, en el que arriesgamos parte de nuestro ser. Por eso es estéril su denuncia.″
Si nos preguntamos qué ha hecho la sociedad, la religión, la cultura, las reglas, las leyes, la civilización de nosotros como seres humanos, la respuesta sería polivalente. No podemos olvidar que así como somos juzgados, también somos parte de ella, de una sociedad cruel, racista, clasista, utilitarista, interesada. De alguna religión que nos quita la libertad, así como las reglas y las leyes, o de alguna cultura que llevamos en la sangre, y que nos encierra en un circulo sin darnos cuenta.
¿Qué pasa, cuando salimos de este círculo? ¿Cuando no aceptamos esta vida? ¿Cuando nos queremos revelar a lo que nos han impuesto? ¿Cuando queremos cambiar el mundo? ¿Cuando luchamos por nuestros propios ideales? ¿Cuando no creemos?. Las respuestas son muchas,…Hoy en día esto es algo que está presente, como un círculo sin comienzo ni fin. Donde buscamos vivir con lo que se nos ha dado y en momentos encontrar algύn escape y ser nosotros; ya sea, escribiendo , cantando, pintando, etc. Sin importar que nos digan locos. ¿Qué hacemos? ¿Luchamos por vivir? “hay que luchar por la vida la muerte siempre llega”.
Una de las cosas mas importante que buscamos los seres humanos es el amor, la entrega, abrirnos. ¿Por qué la necesidad de este amor? ¿ Será que necesitamos un alguien que no es la gente sino nosotros mismos, donde no le tememos a las palabras, a la verdad? Tenemos la necesidad de desnudarnos. Así como poco a poco nos vamos sacando los ropajes y tirándolos por ahí, es como poco a poco nos vamos sacando las mentiras y también las vamos tirando por ahí. ¿Y quienes somos? ¿qué hacemos? ¿cómo nos sentimos? Somos nosotros, que nos estamos abriendo y nos sentimos libres, donde no hay sociedad, religión, cultura, regla, ni ley que lo impida.
Indira Urrutia, 1994
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